Campings, también en otoño

Los campings son una estupenda alternativa vacacional, también en otoño, gracias a una oferta adaptada a la época que incluye alojamientos para escapar del frío, actividades en la naturaleza o gastronomía de temporada. Así lo explica a Efetur la presidenta de la Federación Española de Campings (FEEC), Ana Beriain, quien indica que en estas fechas los campings pueden alcanzar hasta un 40% de ocupación durante los fines de semana”.

Campings, una opción al alza

“Creemos que se va a mantener la tendencia positiva registrada durante el verano -donde alcanzamos una ocupación del 90%-. Aunque todo depende del clima -que condiciona mucho-, creemos que esta campaña también va a ser buena porque en el mes de octubre empezamos bien y confiamos en que podemos continuar por esa línea”.

En términos de ocupación, Beriain apunta, además, que ésta varía mucho en función de la zona. En el sur, por ejemplo, trabajan durante todo el año y, a partir de noviembre, “reciben mucho cliente jubilado de Centroeuropa que pasa el invierno en España”.

Los bungalows, cabañas en los arboles, o casas de madera, dice, son “la mejor opción” alojativa para las noches frescas, con cerca del 65% de las reservas en otoño, porque, asegura, “son muy cómodas, la oferta es muy amplia, y se puede utilizar durante todo el año”. “También las caravanas y autocaravanas tienen gran atractivo en estas fechas”.

Para la época otoñal, estos espacios se dotan de servicios y propuestas adaptadas al frío, como piscinas climatizadas, oferta gastronómica de temporada -como menús micológicos-, y actividades al aire libre entre las que no faltan las rutas de senderismo, la escalada, o la observación de aves. “El otoño es una época muy bonita que permite disfrutar de salidas para recoger setas y hongos, admirar los cambios en la naturaleza, o disfrutar de la fauna en libertad. Todos esos factores son atractivos importantes para el turista de camping”, subraya.

Camping Canto La Gallina (Valdemaqueda, Madrid). Foto: Cedida por la FEEC

Mucha demanda tienen las comunidades de interior porque, asegura, poder levantarse en la naturaleza y disfrutar de la calma de los entornos naturales y, posteriormente, hacer turismo urbano a pocos kilómetros es, a juicio de la presidenta de la FEEC, “un reclamo que en otoño está de moda, principalmente en los puentes -cuando se registran los mayores picos de ocupación-”.

Además de seguir trabajando por captar campistas durante los meses de frío, Beriain aprovecha la ocasión para señalar otros retos y novedades de futuro. El próximo 23 de noviembre, la FEEC premiará el esfuerzo de los empresarios del sector, que este año que han sido los mejores en alguna materia -sostenibilidad, gastronomía, oferta familiar…-, en una gala que se celebrará en Madrid y estará presidida por la secretaria de Estado de Turismo, Matilde Asian.

Entre los retos que hay que afrontar, está impulsar el concepto de campings sostenibles, a través de un proyecto desarrollado en colaboración con el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH). “Queremos crear un proyecto común para todos los campings federados -600 de los 1.200 que hay en España- para que basen en la sostenibilidad sus pilares imprescindibles”, aclara.

La apertura de un nuevo portal que aglutine todos los campings y que permita reservar las experiencias de forma sencilla; y seguir dándose a conocer en el mercado nacional se encuentran también entre los principales desafíos.

Unas medidas que, unidas a los proyectos de apertura de campings que hay “en casi todas las zonas de España”, y a la entrada de capital extranjero, convierten a estos espacios en una opción al alza.

Así que, a la hora de planear una escapada en otoño, conviene recordar que esta “es una época maravillosa para estar en la naturaleza, y disfrutar de las actividades familiares, deportivas y de ocio que se ofrecen en estos establecimientos”, concluye Beriain.

Campings Río Jerte (Cáceres). Foto: Cedida por la FEEC

Algunas propuestas

Los que se animen a disfrutar de esta alternativa vacacional pueden optar, por ejemplo, por el Camping Río Jerte, en Navaconcejo (Cáceres). Se trata de un espacio con 2,5 hectáreas de superficie y capacidad para 288 personas, que se rodea de las piscinas naturales que forma el río Jerte en parte de su recorrido, y de los cerezos, robles y castaños que dejan un espectáculo cromático en esta época del año. A sus instalaciones, que incluyen piscinas, restaurantes, bungalows rústicos con piedra y madera de castaño, y terrazas con vistas a la Sierra de Tormantos y los montes de Traslasierra, se suman  las actividades que proponen a sus huéspedes. Rutas de senderismo, observación de aves, rutas BTT, escalada, o turismo para descubrir Plasencia, el valle del Ambroz, La Vera -donde se encuentra el famoso Monasterio de Yuste-, o el parque natural de Monfragüe son algunas de las sugerencias.

En Zamora encontramos el Camping Sierra de la Culebra, abrazado por cuatro Espacios Naturales Protegidos -Sierra de la Culebra, Lago de Sanabria, Parque de Montesinho (en Portugal) y Arribes del Duero-. Ofrece diferentes opciones de alojamiento, instalaciones deportivas, y un servicio de restauración con una amplia variedad de carnes a la parrilla, con protagonismo de la ternera D.O. Aliste y el cordero de la sierra -todo ello hecho a la brasa con leña de encina-. Además, en otoño, se ofrecen degustaciones de setas de la zona con menús micológicos. En los alrededores se puede disfrutar de propuestas como el avistamiento del lobo en su hábitat natural, escuchar la berrea del ciervo, o recoger setas, entre otras.

También el camping El Canto la Gallina, en Valdemaqueda (Madrid), ofrece una interesante alternativa para una escapada de otoño. Dispone de alojamientos de estilo rústico integrados en la naturaleza, donde no faltan los bungalows con terraza, bañeras de hidromasaje, y vistas a las montañas; piscina; supermercado; parque infantil; restaurante; e instalaciones deportivas que incluyen pista de pádel, minigolf, campo de fútbol y pista de baloncesto. Además, la zona es ideal para disfrutar de senderismo, equitación, observación de aves, o jornadas micológicas.

El Camping Roble Verde (Álava); Camping Lake Caspe (Zaragoza); Camping Playa Poniente (Motril, Granada); Camping De Haro (Haro, La Rioja); o el Camping Acedo (Navarra) son otros buenos ejemplos de la oferta que tenemos en España para disfrutar del camping, también en otoño.

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