Consejos para prevenir el Jet Lag
Jet Lag, también conocido como “mal
de desfase horario”. Alteración de los ritmos biológicos de nuestro cuerpo, que
se producen fundamentalmente cuando viajamos largas distancias a través de
diferentes husos horarios.
Este desorden tiende a
sufrirse más cuando viajamos en dirección de oeste a este, ya que en esta
dirección perdemos horas. Al cuerpo le resulta más fácil adaptarse a un día más
largo (uno “gana tiempo” viajando hacia el oeste), que uno más corto (se
“pierde el tiempo” cuando se viaja al este). Es más fácil retrasar un poco de
sueño por unas horas, que obligarse a dormir cuando todavía no se tiene sueño.
El Jet Lag se produce cuando la rutina normal diaria del cuerpo se
interrumpe después de cruzar varias zonas horarias. Los síntomas, como la
interrupción del sueño y el cansancio, son el resultado de las dificultades del
cuerpo para adaptarse a la zona horaria de la nueva ubicación.
Se llama ritmo circadiano a la rutina
natural de 24 horas del cuerpo, que es controlada por “relojes biológicos”
internos. El Jet Lag se produce
entonces cuando se altera este ritmo circadiano. Los relojes biológicos, que se
encuentran distribuidos en nuestro interior, se componen de grupos de células
que interactúan entre sí. Estas células, a su vez, son controladas por un
“reloj maestro” en el cerebro que mantiene todos los relojes corporales
sincronizados.
Así, estamos acostumbrados a una rutina regular de luz y la oscuridad en
determinados momentos del día, que cuando viajamos a una nueva zona horaria, se
ve interrumpida de golpe y produce el desajuste de estos llamados relojes
internos.
El Jet Lag surge con el avión, porque
nos permite cruzar varias zonas horarias diferentes en tan sólo unas horas.
Después de viajar tan rápidamente, el cuerpo tiene que ponerse al día y volver
a establecer su ritmo circadiano. Pero toma su tiempo, adaptarse a los nuevos
tiempos de luz, oscuridad, alimentación y cambios de temperatura.
Síntomas:
Los síntomas más comunes son:
Fatiga
Dolores de cabeza
Insomnio
Problemas digestivos (diarrea o vómitos)
Irritabilidad
Desgano
Confusión
Sueño durante el día
Hay ciertos factores que
suelen aumentar el Jet Lag:
Deshidratación (no beber suficiente agua)
El consumo de alcohol y la cafeína durante el vuelo
La falta de sueño
Estrés
Tener más de 60 años de edad
También se piensa que la alta altitud y los cambios de
presión de la cabina del avión puede dar lugar a algunos de los síntomas del
Jet lag, independientemente de viajes a través de zonas de tiempo.
Consejos para prevenirlo:
Se recomienda dormir bien en la noche antes del vuelo
Conviene preparase e ir adaptándose al nuevo horario de forma paulatina una
semana antes del vuelo. Si en el destino es más tarde, entonces se debe acostar
más tarde que de costumbre; y si es más temprano, entonces acostarse y
despertarse más temprano.
Dormir bien la noche antes
del vuelo, por lo menos siete horas o más.
Durante el vuelo: intentar
dormir durante la mayor parte del viaje; beber mucha agua; y evitar las bebidas
con alcohol y con cafeína.
Una vez en el destino,
adaptarse al horario local con respecto al sueño y las comidas.
El primer día, intentar
tomárselo con calma. Se recomienda descansar y dejar los recorridos más
exigentes para los días posteriores.
Realizar ejercicios, para
estirar los músculos luego de un vuelo largo.